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NACE UNA ESTRELLA - Prensa 1x1

Si deseamos que El Soberano vuelva a gobernar en su propio país es imprescindible que

Menem

concluya íntegramente su mandato

Los ánimos se exacerban, las pasiones se definen en sus propios espacios de acción, los "objetivos comunes naturales sociales" comienzan a aflorar y a integrarnos, al "enemigo" ya se lo sabe y se lo ve casi tal-cual-es; muchos, los más jóvenes, los "contenidos", los que estuvieron en la "contra" y otros: quieren protagonismo.

Estoy, diría, entusiasmado y satisfecho. Cuando mis pancartas gritaban en el jardín de casa, en Mar del Plata, "el quiste de la corrupción es el Poder Judicial", "el enemigo N°1 del ciudadano argentino es el funcionario público político", "existe un mercado del conflicto que extorsiona sistemáticamente a la sociedad argentina de trabajo y de esfuerzo real", "nuestro sistema de gobierno se ha transformado en el gobierno de los jueces simplemente por su alevosa y premeditada falta de acción judicial y de sentencia", y otras tantas " comillas ", sabía que el camino iba a ser largo, sinuoso, incierto e indefinido, pero concluyente hacia un solo objetivo: transformar esta basura institucional en una Democracia de Participación Directa. Y lo estamos consiguiendo. Y los argentinos nos vamos a convertir en el primer pueblo que transforme su sistema de gobierno de manera radical a través de un movimiento que va paulatinamente "hacia la consciencia".

Pero las transformaciones sociales, políticas, institucionales que estamos promoviendo, igual que una planta de lechuga, requieren de sus propios tiempos de crecimiento y de maduración. Y en lo que estamos haciendo esos tiempos, incluyen el espacio de tiempo completo de Menem hasta el ´99.

Mal que nos pese, y este artículo va dirigido especialmente a cada uno de los periodistas - que son los que están abriéndonos el abanico de una realidad que estaba muy bien escondida y tapada pero que cada uno de nosotros sabía y sentía con dolor e impotencia - decía, mal que nos pese es imprescindible que Menem termine su mandato.

El tiempo de dos años y medio es justo el tiempo que tenemos para escarbar bien profundo en los inmundos pasillos de nuestros tribunales y en las conciencias de aquellos que los habitan. Es el tiempo justo para llegar bien profundo para inmovilizar "al político" -otrora legislador de nuestras necesidades hoy un simple vendepatrias de la más baja estirpe y un mentiroso compul-sivo-. Y es el tiempo justo para perforar profundamente los ánimos de aquellos que llegan a las oficinas ejecutivas públicas para manejar y vender "la cosa pública" al mejor postor y acomodador de "sus propias necesidades particulares", y no las sociales.

Las ironías y los chistes, deben continuar, las investigaciones deben continuar, el trabajo sobre "las falsas autoridades" y "los falsos tabúes" y "los falsos mitos públicos e institucionales" deben continuar. No tenemos que olvidar que al último presidente lo removimos "con la indiferencia" y le vaciamos (sin watergate sin re-voluciones) el sillón de su representatividad. Este manejo de "vaciamiento del poder real" a alguien que se cree con el derecho "Real a" es un manejo netamente argentino, nuestro. Hoy Menem está en el mismo sillón, en la misma picota, y en la misma sensación popular.

Pero hoy existe una enorme dife-rencia con aquél ´89, hoy existe un proyecto de tranformación socio-institucional profunda y no una simple alternativa política -cosmética- de los problemas que tenemos.

Menem debe concluir su mandato para que "El Soberano", el ciudadano argentino de trabajo y estudio, pueda recuperar su gobierno, hoy en manos de delincuentes judiciales, políticos e ins-titucionales, sin un solo chistar, sin ningún cuestionamiento y con todo el peso de su propia convicción de gobernante de sus propias necesidades personales y sociales.

Para ello hay que presionar, presionar y presionar, escarbar, escarbar y escarbar para armar las bases para "simientos sólidos y consistentes" de un nuevo despertar, de un nuevo país". Pero no debemos llegar al punto en que se tenga que ir.

Hoy el objetivo es: vaciarles las urnas, vaciarles las arcas.

Hay que pensar y trabajar 1x1 en octubre para que el voto popular sea: NO LOS VOTO, a ninguno.

Bs.As. 7/6/97-Mauricio J. Yattah

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